Por Daniel Hernández
¿Y el Consejo de la Judicatura?
¿Alguien sabe qué hace José Eduardo Hernández Sánchez? Desde que fue nombrado como presidente del Consejo de la Judicatura del Poder Judicial en Puebla su estancia ha sido bastante gris, por decir lo menos.
Y es que desde septiembre pasado que asumió el cargo no ha informado sobre las acciones en torno a reiteradas acusaciones sobre las decisiones de jueces, que no aluden a simples interpretaciones de la ley, sino que algunas tienen un tufo de corrupción.
Las denuncias que llegan a los medios de comunicación son una mínima parte de las acusaciones sobre lo que ocurre en los juzgados, liberaciones, cambios de medidas cautelares irregulares, malos tratos a los usuarios, entre muchas otras cosas.
El fiscal General del estado, Gilberto Higuera Bernal, cada semana da una nota relacionada con esas malas acciones del Poder Judicial, retrasos en las audiencias, cambios de medidas cautelares a detenidos que una y otra vez son capturados por los mismos o peores delitos.
Tan mal están las cosas que, incluso el juez con licencia y actual secretario de Seguridad Pública, Daniel Iván Cruz Luna, evidenció las fallas en el sistema y pese a las solicitudes para evitar riesgos no fue escuchado como en los casos de dos hombres asesinados mientras estaban en prisión domiciliaria por orden de un juez.
La semana pasada una mujer identificada como Rocío Macías, denunció una serie de violaciones a los derechos de su hija de ocho años quien fue obligada a convivir con su agresor sexual, ignorada por la psicóloga, incluso le daban un trato preferencial dentro de las instalaciones del Poder Judicial a quien habría abusado de una menor de edad.
Hace dos semanas, Monserrat N. informó que un juez concedió libertad condicional a un sujeto que la atacó, amenazó y que en cualquier momento podría repetir el ataque o hasta matarla.
La lista podría ser mucho, mucho más larga, pero, en resumen, el Tribunal Superior de Justicia y principalmente el Consejo de la Judicatura se mantienen como una estatua de sal viendo como las acusaciones se acumulan en los escritorios.
Abusos en la FEDAI
Personal que labora en la Fiscalía Especializada en Delitos de Alta Incidencia se quejan de que su titular, Osvaldo Ramírez Zavala, los somete a exigencias laborales en horarios que violan sus derechos como trabajadores.
Señalan que las quejas llegan a tal grado que tiene una lista de asistencia a través de un grupo de whatsapp en el que deben mostrar una fotografía con su hora de llegada, no importando si un día anterior salieron de madrugada.
Eso ya se prestó a actos de corrupción, pues aseguran que una coordinadora pide cuotas para que los deje firmar la lista de asistencia y justifique retardos.
Y como en otras áreas hay personal que tiene que trabajar jornadas extenuantes a los que incluso les obstaculizan derechos como tomar el periodo vacacional, mientras los allegados tienen mejores horarios, compensaciones y privilegios.
Si bien el trabajo en la dependencia su naturaleza es de mucho sacrificio el fiscal General, Gilberto Higuera Bernal, debería verificar que el trato sea igual para todos.