Daniel Hernández
Aproximadamente a cinco kilómetros de distancia del narcolaboratorio en el que se fabricaban dulces adulterados con droga están las oficinas de la delegación de la Fiscalía General de la República y no se enteraron de lo que ocurría en el lugar.
La Secretaría de Marina desplegó un número especial de elementos para tareas especiales y tampoco supieron del inmueble en el que fue localizado un hombre apodado “El Burro” que era el líder de ese grupo de envenenadores.
La Secretaría de la Defensa Nacional tiene toda una zona militar con elementos especialistas en diferentes áreas y tampoco se dieron cuenta de lo que ocurría en San Andrés Cholula.
La Guardia Nacional aumentó la presencia de elementos en el estado, ¿de qué sirvió ?, en las áreas de seguridad no es un secreto que estos elementos y el Ejército Mexicano son los últimos en llegar en los llamados de auxilio y en muchas ocasiones sólo llegan a posar para la foto junto a la zona acordonada.
Es cierto, las autoridades de los ayuntamientos deben saber lo que pasa en sus municipios, pero cada dependencia debe asumir responsabilidades en el ámbito de sus facultades, prevenir, indagar y perseguir delitos del fuero federal no se puede dejar en responsabilidad de policías que no tienen facultades de investigación.
Por cierto
¿Las presidentes municipales de la franja del huachicol en la era morenovalliata combatieron ese delito?