El chile poblano es la estrella del tradicional chile en nogada, pero también es un producto que se ha visto afectado por la contaminación en la zona del río Atoyac y para el que se plantean alternativas como la hidroponía.
Así lo refleja el artículo «Crecimiento, rendimiento y calidad de chile poblano cultivado en hidroponia bajo invernadero», que publicaron en 2021 investigadores del Colegio de Posgraduados Campus Puebla.
Los investigadores Brenda Hernández Hernández, Mario Alberto Tornero Campante, Engelberto Sandoval Castro, María de las Nieves Rodríguez Mendoza, Oswaldo Taboada de Gaytán y Benjamín Peña Olvera pusieron a prueba tres tipos de chile poblano bajo siembras controladas.
De acuerdo con el texto que se publicó por el Instituto Nacional de Investigaciones Forestales Agrícolas y Pecuarias, la idea surgió ante los problemas que vive el campo del estado.
En el artículo, se expone que el chile poblano es un producto que se encuentra en diferentes partes del mundo y estados de México.
En el caso de Puebla, destacaron que hay producción en municipios como San Martín Texmelucan, San Lorenzo Chiautzingo, San Salvador El Verde, San Felipe Teotlalcingo y San Matías Tlalancaleca, entre otros de la región conocida como el Alto Atoyac.
Aunque estos puntos del estado son relevantes para el chile poblano, el cultivo se ha visto afectado por factores fitosanitarios que han ocasionado que la presencia de hongos y bacterias reduzcan el rendimiento de la superficie de siembra, con subsecuentes pérdidas económicas.
Por ello, los investigadores del Colegio de Posgraduados Campus Puebla se propusieron buscar alternativas de producción y en 2017 pusieron a prueba la hidroponia en invernadero.
La investigación fue desarrollada en una unidad agrícola del colegio que se encuentra en San Agustín Calvario, municipio de San Pedro Cholula y se realizó durante la primavera otoño de ese año.
En sus pruebas evaluaron dos variedades locales originarias de Tlacotepec y Tlalancaleca, así como una que se conoce como San Luis y que comercializa la empresa Caloro, pues son productos que se utilizan en el campo del Alto Atoyac.
En su evaluación, los científicos buscaron identificar el rendimiento y la calidad de los frutos obtenidos al medir la altura de las plantas, el ancho de tallo y el número de bifurcaciones, de hojas, flores y frutos, así como el contenido nutricional.
De acuerdo con los resultados, la variedad San Luis fue la que dio mayor rendimiento y calidad de fruto, pero fueron las locales las que presentaron un mayor número de frutos aunque de menor calidad.
Para los científicos, el comportamiento agronómico de las variedades criollas mediante hidroponia se puede comparar con la variedad San Luis y los tres pueden ser una opción para producir chile poblano en la región del Alto Atoyac.
