Pedro Alonso
Además de la pipitilla, ya casi dividida, algunos de sus miembros se fueron a Movimiento Ciudadano y, en el anonimato, decidieron apoyar a Abraham Salazar.
Otros, de frente, como Simón González, quien no necesariamente fue morenista pero sí se le reconoce su lucha social y su movimiento en la izquierda con genes perredistas, declaró abiertamente su apoyo a Movimiento Ciudadano.
Lo que me llama mucho la atención es el caso de Angélica Cervantes, quien, gracias a la tómbola de MORENA, logró ser diputada por la vía plurinominal. Su consejero y/o asesor político, Juan Flores, sin duda morenista de hueso colorado, traicionó a la Cuarta Transformación y se fueron con Movimiento Ciudadano.
Otros nombres, lamentablemente, no los recuerdo bien. Los amigos de Movimiento Ciudadano me pasaron la lista de todos aquellos morenistas que juraron amor eterno a Abraham Salazar, pero hoy se acercan nuevamente a los triunfadores para ver si sacan algo de provecho.
Incluso en las redes sociales, los amigos de los traidores de MORENA los han ido evidenciando y seguirán haciéndolo, mostrando cómo se fueron a otros proyectos municipales y locales buscando el beneficio personal, llenarse el bolsillo y seguir viviendo del pueblo, todo ello seducidos por el canto de la sirena.
Lo cierto es que muchos morenistas de San Martín Texmelucan que apoyaron a Nacho Mier se fueron a otros proyectos. Repito, algunos que no aparecieron en esta calumnia están cercanos a los candidatos triunfadores buscando un puesto. Aseguran que gracias a ellos ganaron, que votaron para que se diera el segundo piso de la Cuarta Transformación en la región de San Martín Texmelucan.
La hipocresía en la política.
Estén pendientes de la próxima calumnia, probablemente el viernes… analizaremos si el Gallo, el candidato independiente logró con su votación tener dos posiciones dentro del nuevo ayuntamiento de San Martín Texmelucan