-Ventanas, gatos y vikingos, así son las obras de algunas de las jóvenes ilustradoras que están exponiendo este fin de semana en la convención de La Mole
Ángel Bañuelos
Ciudad de México.- Este fin de semana se está llevando a cabo La Mole, convención de cómics, ciencia ficción y videojuegos, en la Ciudad de México. Aquí te presentamos algunas de las artistas independientes que están compartiendo su trabajo en el Artist Valley de este evento.
Lorena Velazco/Larenn Syanne
La creadora del Michiverso, Lorena Velazco, conocida como Larenn Syanne, hizo presencia en esta edición de La Mole para compartir sus escenarios urbanos mexicanos cuyos protagonistas son gatos antropomórficos con los que nos podemos identificar.
A menudo, en sus páginas existe un gato que ha sido víctima de su torpeza, como aquel al que se le cayó su atole en «El Michibus»:
«Lo bautizamos como el accidentado, y a la gente le encanta buscarlo en las ilustraciones. Siempre tratamos de poner esas desgracias que te pueden arruinar el día, desde que se te cae el atole hasta que te apachurra la puerta del metro (…) la gente se ríe o siente muchísima empatía por el gatito y dicen ‘¡soy yo'» cuenta Lorena.
«El Michibus», ilustración que lanzó a la fama el proyecto Syanne:
Keel/Quintaesencia
Fanática de las valkirias y los vikingos, se interesó por su versión fantástica tras ver, de niña, «She-Ra, La Princesa del Poder», serie animada de los 80’s cuya protagonista es similar a una Valkiria, entidad de la mitología nórdica.
«Investigué más sobre estas mujeres guerreras y me presentaba una gama de dioses que yo empecé a investigar en textos como El Cantar de los nibelungos (texto germánico del siglo XIII). Me gustó el concepto de que (los vikingos) eran hombres y mujeres que luchaban hasta el final de sus días, no se rendían (…) y tenían una sociedad muy rica y muy grande».
Jessica Robles/Yakio
Las acuarelas de Jessica Robles, alias Yakio, pintan vistazos a historias que dejan comisión a la imaginación y los sueños. Además de sus personajes originales, hace recreaciones de íconos de la infancia, como El Castillo Vagabundo y de la adultez, como los personajes de la serie El Mandaloriano.
Es llamativa una de sus ilustraciones, de la cual Jessica cuenta su historia, dos enamorados, uno es un clavadista olímpico español y el otro un luchador mexicano, reunidos frente al Palacio de Bellas Artes.